viernes, 28 de agosto de 2015

LIU CIXIN: Ganador de El Premio Hugo, el más importante de la literatura de ciencia-ficción.

Un escritor chino gana el mayor premio mundial de ciencia-ficción

 

Los premios Hugo reconocen por primera vez una novela escrita no inglesa, de Liu Cixin





El escritor de ciencia ficción chino Liu Cixin.
Han tenido que pasar 62 años pero, finalmente, el premio Hugo, el más importante de la literatura de ciencia-ficción, otorgado por la Sociedad Mundial de Ciencia Ficción (WSFS), ha galardonado este año un trabajo originalmente no escrito en inglés en la categoría de Mejor Novela. El ganador es el escritor chino Liu Cixin (Henan, 1963), con su novela The Three-Body Problem,una ficción sobre cómo se prepara la Tierra ante una invasión alienígena.
Liu Cixin está considerado como uno de los escritores más consolidados del género en su país. Sus ocho premios del trofeo Yinhe (Galaxia), consolidan su trayectoria en esta materia. En sus textos versa sobre el rol de China en el mundo, tal y como ocurre en su novela The Three-Body Problem.
El libro ganador, que no se ha publicado en España, es la primera entrega de una trilogía que ya es un superventas en China. Su primera edición es de 2007 y tuvo que ser traducida y publicada en inglés para optar al Hugo de este año, como establecen las bases del premio.
Los premios Hugo, que han reconocido el trabajo de grandes autores de la ciencia-ficción (como Isaac Asimov, Orson Scott Card o Arthur C. Clarke) han vivido este año su edición más polémica. De las 16 categorías que se premian, cinco han quedado desiertas. Este número equivale al total de ocasiones en que los galardones han sido declarados desiertos, en diferentes categorías, en toda la historia de los Hugo, según la organización.
La polémica de este año tuvo como detonante una campaña llamada Sad Puppies (“Cachorros tristes”), lanzada por escritores de ciencia-ficción que se oponen a la supuesta corrección política de los Hugo, que el año pasado “fueron barridos por escritores de color y mujeres”, según Kameron Hurley, que en esa edición se llevó dos.

Dos de los principales impulsores de la polémica han sido los autores Larry Correia y Vox Day,  tildados de "derechistas" por medios como el británico The Guardian (Vox Day, de hecho, llegó a escribir que considera los derechos de las mujeres "una enfermedad que debe ser erradicada"). Hurley ya advirtió sobre sus esfuerzos por manipular el premio en abril de este año en el diario The Atlantic: "En los últimos tres años, Correia ha liderado una campaña anti-progresista pequeña pero ruidosa llamada Sad Puppies en un intento de jugar con los Hugo".

FUENTE:   EL PAÍS


MUJERES A LA LITERATURA: Escritoras.

El momento de las escritoras latinoamericanas

 

Escritoras de América Latina, al fin visibles





Cristina Rivera-Garza, Wendy Guerra, Guadalupe Nettel, Lina Meruane, Claudia Piñeiro, Gabriela Wiener, Samanta Schweblin, Rosa Beltrán, Claudia Amengual…
La onda de silencio que ha cubierto a las escritoras latinoamericanas se ha roto del todo. Sus voces, diversas y de todas las generaciones avanzan por el umbral de una época dorada para la literatura al abrirse paso contra las etiquetas, el machismo, la discriminación, los tópicos, los prejuicios, la incultura o la inercia del ninguneo del mundo del libro, la sociedad y los medios de comunicación. Aunque la visibilidad y el reconocimiento de esas autoras es mayor en España que en su propio continente.
…Piedad Bonnett, Leila Guerriero, Sofía Segovia, Aurora Venturini, Yolanda Arroyo, Zoé Valdés, Laia Jufresa, Flavia Company, Marbel Sandoval Ordóñez…
Son algunos de los nombres de narradoras que ya tienen un lugar en la memoria de los lectores, unas cuantas empiezan abrirse paso y muchas más que no cesan en su empeño de publicar. Pertenecen a una estirpe de creadoras de un continente que la gente relaciona sobre todo con grandes poetisas como Gabriela Mistral, Alfonsina Storni, Olga Orozco, Alejandra Pizarnik, Rosario Castellanos, Blanca Varela o Ida Vitale.
“Al sabernos excluidas de la tradición nos sentimos libres del imperativo de honrar sus convenciones”, dice Carolina Sanín

“La suerte es que hablamos de mujeres de generaciones muy diversas: De Hebe Uhart (1936) o Griselda Gambaro (1928), pasando por Laura Restrepo (1950) hasta llegar a Gisela Leal (1987), por dar solo unos pocos nombres. Están ubicadas a lo largo de toda la geografía de la lengua, es decir, no es un fenómeno que se da solo en tal o cual país. Visitan todos los géneros: el teatro, la poesía y la novela por supuesto. Y sus temas son tan amplios como nombres hay. Me parece que sienten la libertad de contar cualquier cosa y de hacerlo sin responder a ningún deber ni estereotipo”. Este es el mapa descrito por Pilar Reyes, que lleva dos décadas oteando y analizando la literatura latinoamericana en su condición de lectora y editora, primero en Alfaguara Colombia y desde hace unos años en España.
…Selva Almada, Carolina Sanín, Isabel Mellado, Valeria Luiselli, Rita Indiana, Mayra Santos-Febres, Pola Oloixarac, Giovanna Rivero, Betina González…
Esa proliferación y normalización de nombres en la literatura rompe y desafía lo establecido. Varias de estas narradoras denuncian la prolongación de prácticas de otras épocas: creen que la historia literaria sigue sin hacer justicia a las mujeres, se sienten excluidas de la tradición, perciben un trato que mezcla la condescendencia y el asombro ante sus libros y notan cierta desigualdad frente a los hombres.
“Tengo la impresión de que en ocasiones el interesante, y fundamental, matiz político de la narrativa escrita por mujeres en Latinoamérica ha alejado su obra de los lectores más acomodados de nuestro país (España), que cuando se han acercado a parte de la literatura latinoamericana lo han hecho buscando aún ‘lo real maravilloso’, lo exótico’ o cierta forma de ‘empalago emocional’, es decir, las propuestas menos interesantes de una literatura rica, riquísima”, explica Julián Rodríguez, editor de Periférica, atento a la creación e innovación literaria en español.
 

La escritora puertorriqueña Mayra Santos-Febres.

Nombres que conviven con los clásicos y con los de narradoras contemporáneas y populares que empezaron a romper hace unas décadas ese silencio sobre la literatura latinoamericana escrita por mujeres. Entre esos nombres contemporáneos figuran las chilenas Isabel Allende, Marcela Serrano y Diamela Eltit; las argentinas Clara Obligado y Ana María Shua; la colombiana Laura Restrepo; las nicaragüenses Claribel Alegría y Gioconda Belli; la cubana Reina María Rodríguez; las uruguayas Cristina Peri Rossi y Carmen Posadas y las mexicanas Ángeles Mastretta, Margó Glanz y Elena Poniatowska, segunda latinoamericana Premio Cervantes y única narradora, la otra fue la poeta cubana Dulce María Loynaz. Y, detrás de ellas, las argentinas Victoria y Silvina Ocampo, la chilena María Luisa Bombal o la mexicana Elena Garro que abrieron desde la primera mitad del siglo XX ese universo más allá de lo masculino o femenino donde lo que cuenta es la literatura.
…Sabina Berman, Karla Suárez, Consuelo Triviño, Andrea Jeftanovic, Mayra Montero, Daniela Tarazona, Gisela Leal, Reina Roffé, Bárbara Jacobs…
Cada vez que la argentina Leila Guerriero, autora de Una historia sencilla (Anagrama), escucha la palabra “mujeres” relacionada con la palabra “literatura” no puede —ni quiere— evitar erizarse un poco: “Más allá de que es verdad que antes había menos mujeres escritoras —y menos mujeres astronautas, chefs, presidentas, empresarias, conductoras de autobuses—, seguir pensando cualquier universo creativo en términos de género no hace más que reproducir un punto de vista perimido que transforma un hecho evidente (que las mujeres somos capaces de conducir un autobús, ir al espacio o escribir novelas y ensayos) en motivo de sorpresa o admiración. Algunos de mis escritores favoritos son mujeres pero jamás pensaría en ellas como ‘mujeres’ sino como ‘personas que están entre mis escritores favoritos’. Prefiero pensar que si hoy la presencia de mujeres en la literatura de nuestros países es mayor a la de hace algunos años, no se debe a una moda, ni a que las editoriales tienen que cumplir con determinado cupo femenino como consecuencia de la corrección política que nuestro siglo ha erigido como el único dios ante el que hay que prosternarse, sino a que, como en todos los demás ámbitos, esas mujeres pueden ejercer su vocación sin pedir permiso ni disculpas y, sobre todo, a que están escribiendo (como sus colegas varones, sin que eso le llame la atención a nadie) buenos libros”.
 

Ilustración de Ana Juan

La calidad literaria es lo único que también interesa a Claudio López de Lamadrid, director editorial de Literatura del Grupo Penguin Random House, sin ocultar algunas sombras en el ecosistema del libro: “No distingo entre la literatura hecha por mujeres y aquella hecha por hombres, y sin embargo es un tema que me preocupa porque creo en las cuotas y procuro siempre incorporar voces femeninas a mis catálogos. Algunos de los escritores que edito cuya carrera más me interesa son mujeres. De todos modos, sí es cierto que la tendencia es a ningunear un poco a las autoras frente a los autores, y una tendencia es a olvidarse de ellas en balances, repasos y menciones”.
Ese olvido al que se refiere López de Lamadrid sucede más en el propio continente latinoamericano. “En México y en general en América Latina la narrativa escrita por mujeres se abrió camino a mediados de los años 50, con Elena Garro, seguida de Rosario Castellanos y un nutrido grupo de mujeres cultas y creadoras de grandes obras que padecieron (y lo siguen padeciendo después de muertas) el machismo exacerbado de los hombres que dominaban la vida intelectual”, explica Nubia Macías, directora del Grupo Planeta para México, Centroamérica y EEUU y exdirectora de la Feria del Libro de Guadalajara. “En nuestro continente”, añade Macías, “siempre se habla de los ‘grandes autores’ cómo si sólo fueran hombres. La historia sigue sin hacerles justicia a las mujeres escritoras, salvo por Sor Juana, a la que se le rinde culto... y sobre todo gracias al ensayo sobre ella escrito por Octavio Paz. Esta actitud no ha cambiado: Elena Poniatowska, la más reciente Premio Cervantes fue denostada por más de un intelectual latinoamericano justo cuando le dieron el galardón. Ahora hay un grupo muy amplio de mujeres que, a fuerza de talento y del reconocimiento de los lectores, ha ganado terreno, pero a quienes el establishment sigue escatimándoles el reconocimiento: Mayra Santos-Febres, Wendy Guerra, Mónica Lavín, Brenda Lozano, Liliana Blum, o Carmen Boullosa”.
…Luisa Valenzuela, Carla Guelfenbein, María Eugenia Ramos, Patricia de Souza, Fernanda García Lao, Yanitzia Canetti, Laura Esquivel, Ema Wolf, Alejandra Costamagna…
Un lastre histórico cuyo presente analiza Carolina Sanín, crítica literaria y autora colombiana de Los niños (Siruela), desde la esquina de la ironía y el pragmatismo: “Al sabernos relativamente excluidas de la tradición literaria de nuestra región, las escritoras latinoamericanas podemos sentirnos libres del imperativo de honrar las convenciones de esa tradición y ser ajenas a la aspiración de que se nos reconozca como sus representantes”. A veces, afirma Sanín, “en la emoción con la que se reciben las obras de estas escritoras no encuentro la celebración de un descubrimiento liberador, sino una mezcla de condescendencia y asombro. Otras veces, me parece que se percibe a la escritora como fraudulenta”. En la fantasía latinoamericana, añade Sanín, “quien escribe es un hombre; la mujerpretende ser escritora. Quizás se piensa que, al escribir, ella en realidad hace otra cosa: algo misterioso, una suerte de brujería amenazante, un sabotaje. Y tal vez así es”.
 

La escritora mexicana Guadalupe Nettel.

Solo que su hechizo creativo es el mismo de cualquier sexo. Un asomo a ese mundo más innovador y arriesgado lo ofrece la chilenaDiamela Eltit, cuya última novela esFuerzas especiales (Periférica):“Resulta fundamental la relación entre escritura y literatura. Es precisamente la escritura como gesta o como gesto la que puede ampliar lo que entendemos por literatura: remodelar sus bordes, ampliar sus fronteras, registrar en sus movimientos el estado y hasta el estallido de las técnicas. Se trata de ingresar en la letra como un territorio estético para provocar un tumulto de imágenes entre las que sin embargo se aloja el silencio. La unión entre el exceso y el silencio no deja de ser un desafío”. Eltit reconoce que le interesa mantener una política de escritura que “afronte el riesgo y hasta el abismo que puede producir el goce de la letra con la letra”. Las posibilidades son muchas, aunque ella prefiere transitar “por algo parecido a una literatura okupa, ocasional, en constante movimiento, aunque esté cerca de ser desalojada letra a letra o frase a frase, justo en medio de la calle”.
...Nona Fernández, Myriam Moscona, Natalia Berbelagua, Julia Álvarez, Damaris Calderón, Inés Mendoza, Daína Chaviano, Pilar Quintana, Gabriela Alemán…
“En los años cincuenta, las mujeres se abrieron camino ante el machismo de la vida intelectual”, sostiene Nubia Macías

La mexicana Brenda Lozano, autora de Cuaderno ideal, no cree que haya historias o frases ideales, "y pareciera que escribir, como leer, mucho tienen de cuaderno, más como un camino y sus desviaciones que un punto final. (¡Ese Apocalipsis!)". El pasado y el presente lo ve en Josefina Vicens, "que abrió puertas en México". Recuerda que "en tiempos en los que lo mexicano era el gran tema (pienso en Rulfo, Paz, el joven Carlos Fuentes), escribió El libro vacío, una bellísima novela más cercana a lo que se escribe hoy, mirando los temas de la vida cotidiana y la imposibilidad de escribir". No duda en afirmar que en México, Argentina, Chile o Colombia hay cosas muy buenas, y le interesa, sobre todo, lo que se escribe ahora.
Narrativas más tradicionales o más innovadoras, pareciera que la edición de libros creados por mujeres estuviera normalizada. Casi un centenar de ellas copan las librerías latinoamericanas y españolas. Pese a ello, surge, inevitable, el interrogante: "¿Es difícil publicar?", se pregunta la colombiana Marbel Sandoval Ordóñez, autora en su país de En el brazo del río, y contesta: "Mucho y más cuando se es mujer. La voz de las mujeres en la literatura colombiana sigue siendo marginal y lo digo como buena lectora, que siempre busca voces nuevas, y como escritora". Sandoval Ordóñez, que vive ahora en Madrid, cuenta que la industria editorial colombiana "ha abierto más espacios a la poesía escrita por mujeres, quizá porque la consideran femenina, que a la narrativa". Su experiencia en España no es muy diferente: "Aquí, una voz nueva tiene dificultad para abrirse camino, más si no se escribe, como en mi caso, lo que el mercado quiere. ¿Y que quiere el mercado?, le pregunté a un editor experimentado. Historias como las de la crisis, me respondió. Sin palabras. Para ese tipo de historias vuelvo al periodismo que es mi cuna".
…Lucía Puenzo, Lena Yau, Ana Nuño, Alia Trabucco, Ángela Becerra, Andrea Maturana, Brenda Lozano, Mónica Lavín, Fietta Jarque...
Escribir, escribir. No cesan en su empeño, como cualquier escritor. La ruta de la uruguaya Claudia Amengual, autora de Cartagena(Alfaguara), es la búsqueda de superar desafíos estéticos en cada nueva obra. Insiste en que su condición de mujer nada tiene que ver con la calidad de esas obras, “aunque sí con una textura distinta que enriquece el universo literario en el que aún predominan los escritores”. Admite que es posible intentar una definición de literatura femenina y de literatura masculina, “pero desde una teoría seria y no con meros clichés de género”. Así es que mientras el tema no se aborde con esa seriedad, Amengual prefiere hablar de la calidad literaria “sin pensar en otras etiquetas reductoras”. Tiene la convicción de que la única y mejor manera de reivindicar sus derechos como escritora es comprometiéndose con su trabajo y con sus lectores: “Es decir: escribiendo”. Como los hombres.
...Carmen Boullosa, Inés Bortagaray, María Fernanda Ampuero, Karina Sainz, Lilián Pallarés, Jacinta Escudos, Dorelia Barahona, Teresa Dovalpage, Carolina Sborovsky, Inés Fernández Moreno, Dolly Mallet, 


Wasap a una joven bloguera

LAURA RESTREPO
A Laura Quinceno, que en su blog me pregunta cómo pinta hoy el panorama para las mujeres escritoras.
Creo que bien, tocaya, siempre y cuando no incurras en uno de estos tres noes:
1. No pretender volverte rica con las letras. Ganarte el pan, sí, eso es otra cosa y es tu derecho elemental, como lo es para cualquier carpintero, dentista o astronauta.
2. No dejarte apabullar por el carrusel de los prestigios. La cultura que no tiene qué comer se alimenta de vanidad. Y del reciclaje de antiguos prestigios: tú, mi amigo, tú eres como Kafka. Gracias, gracias, pero ¿tú? Tú, en cambio, eres como Joyce. Y este que ahora publicamos, este es de la altura de Faulkner. ¡Y miren este nuevo Proust en el cielo de los suplementos culturales! Y así va pasando la pelota, como en el fútbol de las grandes ligas: entre varones.
3. No apostar a los premios, que hoy por hoy no significan mucho. Han proliferado tanto, que los entregan más fácilmente que las tarjetas de crédito. A estas alturas hay más premios literarios que escritores, y lo que es más grave, parece haber más escritores que lectores.

Laura Restrepoes escritora colombiana, autora de  Hot Sur (Planeta) y Delirio (Alfaguara).


FUENTE:   EL PAÍS


STIEG LARSSON: Y después de muerto...

La cuarta entrega de 'Millennium' llega a las librerías


El autor, David Lagercrantz, firma libros nada más publicarse la entrega.

El autor, David Lagercrantz, firma libros nada más publicarse la entrega.

 Se trata del primer libro de la saga que no ha sido escrito por su autor original, Stieg Larsson, que falleció en 2004

'Lo que no te mata, te hace más fuerte', la cuarta entrega de la serie de novela negra 'Millennium', ha salido a la venta este jueves en Suecia y en una veintena de países -España incluido- al término de una campaña de lanzamiento preparada al milímetro.
Una cincuentena de lectores fieles, principalmente hombres, esperaban a medianoche (a las 22.00 horas GMT) frente a una librería del centro de Estocolmo, abierta excepcionalmente a esa hora, para poder adquirir un ejemplar y conseguir una dedicatoria de su autor, David Lagercrantz. El sucesor del ya fallecido Stieg Larsson. "¡Es genial!", exclamaba el emocionado escritor, mientras acogía a los curiosos antes de sentarse detrás de una mesa para dedicar su libro.
"Llegué antes para poder sentir bien el ambiente y he sido el primero en lograr una dedicatoria. Leerlo será genial. Por supuesto, habrá comparaciones, pero creo que dará la talla", señalaba entusiasmado Per, de 38 años.
Suspense hasta el final
Hasta el momento, la editorial Norstedts había hecho todo lo posible para mantener el suspense. Pocas personas han podido leer el libro antes de su salida y solo se había publicado una breve sinopsis de la intriga.
'Lo que no te mata, te hace más fuerte' habla de la agencia de inteligencia estadounidense NSA y de inteligencia artificial. En todo el mundo, se han impreso 2,7 millones de copias, 500.000 en Estados Unidos, y 41 editoriales han comprado los derechos.
La serie fue creada por el escritor sueco Stieg Larsson, que falleció repentinamente de un ataque al corazón en 2004 a los cincuenta años, sin poder disfrutar del éxito de su novela, que se ha convertido en un fenómeno mundial de ventas con cerca de ochenta millones de ejemplares vendidos. Su obra ha inspirado además dos adaptaciones al cine, una en Suecia y otra en Hollywood.
El sucesor al frente de la obra, el sueco David Lagercrantz, confesó el miércoles haber escrito la cuarta entrega en un estado "maníaco-depresivo". "No era la persona idónea con la que convivir, porque estaba pensando todo el tiempo en el libro. Temía constantemente no estar a la altura", admitió el escritor que ha continuado la historia del periodista Mikael Blomkvist y la pirata informática Lisbeth Salander.
Según Lagercrantz, "cualquier historia tiene un punto de partida y mi punto de partida fue absorber el mundo de Larsson en mi organismo". Para ello, trabajó duro leyendo y releyendo la trilogía 'Millennium', multiplicando las búsquedas, haciéndose preguntas sin cesar.
Cosas de familia
El padre del escritor fallecido, Erland Larsson, y también su hermano, Joakim Larsson, son los herederos oficiales, mientras que su pareja, Eva Gabrielsson, con quien Larsson vivió durante 32 años, se vio relegada y los acusó de haber efectuado una mala gestión de su herencia. Hace un par de meses, Gabrielsson, que nunca logró llegar a un acuerdo con la familia Larsson, expresó su desacuerdo con todo el negocio que ha generado "Millennium".
"Uno dice que los héroes deben seguir vivos, pero esto son tonterías porque, de hecho, es un tema de dinero. Hay una casa editorial que necesita dinero y un escritor que no tiene nada que escribir, salvo una copia de lo que otros hacen", denunció en una entrevista concedida a la AFP. Para Gabrielsson, Lagercrantz, procedente de la élite intelectual de Estocolmo, no tiene ningún punto en común con Larsson, un periodista de provincias, militante de extrema izquierda y antifascista que detestaba la fama.
Sin embargo, la editorial Norstedts, considera a Lagercrantz, especializado en deporte y conocido por ser el autor de la biografía del jugador de fútbol Zlatan Ibrahimovic, el candidato perfecto para escribir la novela. "No sirve de nada convertirme en un estereotipo bajo el pretexto de que procedo de un buen barrio", se defiende el autor, de 52 años, para quien su obra está impregnada de "un compromiso apasionado contra la intolerancia, el racismo, los prejuicios de clase".
La perspectiva del éxito
Tanto el escritor sueco como Norstedts guardan silencio en lo que respecta a los ingresos estimados que generará el nuevo libro. Hasta el momento, solo Erland y Joakim Larsson han indicado que su parte de beneficios será destinada por completo a la revista antirracista 'Expo', y prevén para empezar unos cinco millones de coronas (más de 500.000 euros).
Para la familia Larsson, el libro es excelente. "Yo lo guardé en mi mesa de noche una semana antes de abrirlo. Tenía miedo. Una vez que comencé a leerlo, fue imposible parar", confiesa Joakim.

Ahora Lagercrantz espera el veredicto de los lectores. "Esta fue la gran pasión de mi vida, queda que los seguidores de la saga juzguen si tuve éxito o no. Pero Dios sabe que, de mí, lo he dado todo".

FUENTE:  EL DIARIO VASCO.com


lunes, 24 de agosto de 2015

MARÍA DUEÑAS: 'La templanza'

La obra de María Dueñas, exitosa pese a la crisis económica



Tras las numerosas ventas de 'El tiempo entre costuras', la autora ahora promociona 'La templanza'


Dueñas, en la presentación de su última obra en Panamá.

Dueñas, en la presentación de su última obra en Panamá. 


La escritora española María Dueñas confiesa que ha sido "reconfortante" ver que su tercera novela, 'La templanza' (Planeta, 2015), ha tenido un lanzamiento y una acogida "tan grande", a pesar de que el sector editorial ha sido golpeado por la crisis económica.

Dueñas (Puertollano, Ciudad Real, 1964) dijo que, "la verdad", fue un lanzamiento grande en medio de una crisis que "ha afectado a todos y entre ellos al sector editorial de manera fuerte".

"Y que haya habido una apuesta editorial tan grande otra vez es muy reconfortante, me llena de gratitud y de confianza pues ha sido medio millón de ejemplares, en un lanzamiento simultáneo en España y en toda América Latina" en marzo pasado, indicó Dueñas, que participa en la XI Feria Internacional del Libro (FIL) de Panamá.

'La templanza' retrata el fracaso económico del minero Mauro Larrea, a quien una inversión arriesgada deja en la ruina, pero que en ese momento de crisis e incertidumbre se apasiona por el amor de una mujer.

La novela transcurre entre México, La Habana y Jerez de la Frontera, y es una historia de coraje y de asumir riesgos, detalló la narradora.

Dueñas añadió que la acogida "excelente" que ha tenido esta obra por parte de los lectores, la crítica y la prensa cultural le ha dado "satisfacciones" y a la vez la estimula para "seguir trabajando y para seguir intentando llegar a los lectores".

"Estoy muy contenta porque es una revalorización, una especie de reválida que vuelves a pasar con el tercer libro, porque dicen que a la tercera va la vencida, ¿o no?", expresó la literata, cuya segunda novela fue 'Misión olvido' (2012).

La autora del éxito de ventas 'El tiempo entre costuras' (2009) dijo que ante los efectos de la crisis ella ha corrido con un poco más de suerte porque sus libros se venden "muy bien" y no ha notado tanto ese efecto, contrario a otros escritores con volúmenes de venta menores y que han sido afectados "muchísimo".

Dueñas, que recordó los efectos de la crisis en el mundo de la cultura, destacó que en España se confía en que la situación "vaya remontando", y ya parece que "repunta un poco".

Para la profesora, quizás la solución a la crisis no esté en manos dePodemos o de Ciudadanos, aunque reconoció que estos partidos "están siendo un revulsivo para la situación que había", que llegó a "niveles insostenibles".

"Así lo han demostrado las urnas, lo ha demostrado la crisis, lo ha demostrado todo, ha habido unos niveles de corrupción y unos niveles inasumibles de muchas cosas; entonces estos dos partidos están moviendo los cimientos y están haciendo reconsiderar muchas cosas, y eso en gran parte es positivo".

Insistió en que lo que ocurre con la corrupción en España es una "absoluta vergüenza" y en que, a pesar de que algunas cosas se han estado "desatando" y "juzgando", todavía "quedan muchas cosas por hacer, en una situación que el país lleva arrastrando muchos años".

A juicio de Dueñas, los que más han sentido la crisis no es la gente que la originó, "que sigue sentada en sus sillones muy cómodamente, por desgracia", sino los jóvenes que se gradúan en la Universidad, que tienen muy pocas oportunidades, y están saliendo al al extranjero, "con éxito además".

"Vienen muchos a Latinoamérica, van a otros países europeos, encuentran trabajos, se nutren y se curten de experiencias, eso es muy enriquecedor de gran manera, pero también es verdad que hay una fuga de talentos, de personas", remarcó.


FUENTE:    

MICHAEL ENDE: Maestro en la fantasía

La fantasía de Michael Ende perdura tras su muerte

 Se cumplen veinte años del fallecimiento del autor de 'La historia interminable' y 'Momo'

  Portada de una de las obras más conocidas de Ende.

Portada de una de las obras más conocidas de Ende.



Michael Ende reinó en la fantasía mucho antes que J. K. Rowlling y su 'Harry Potter' o las sagas de tinta de Cornelia Funke. El escritor alemán se adueñó de los mundos imaginarios con libros como 'Momo' y 'La historia interminable', que sedujeron a millones de lectores adolescentes (y adultos) de varias generaciones.

Ende fallecía el 28 de agosto de 1995 a los 65 años en Sttutgart a causa de un cáncer.
A disgusto con la realidad y la sociedad en la que vivió, se pasó la vida buscando alternativas imaginarias. Para él había dos tipos de literatura, la que declara abiertamente que es ficción y la que simula que es realidad. Merlín de la palabra, se convirtió en el Rey Midas de la literatura fantástica gracias al éxito universal de su 'Historia interminable', aparecida en 1979, traducida a cerca de 40 idiomas y con ventas multimillonarias. Todo un fenómeno, fue el libro más vendido en Alemania durante cuatro años y dio pie a tres películas. Es la historia de Bastián Baltasar Bux, un niño gordito y e infeliz que, como la Alicia de Lewis Carroll, salta al otro lado del espejo a través de un libro robado. Atrapado en un mundo fantástico plagado de elfos y gnomos, descubre que él mismo protagoniza el libro. Montado en los lomos de Fújur el dragón volador, Bastián no encontrará el camino de vuelta del reino de Fantasía.

Llevada al cine por primera vez en 1984 en una versión de Wolfgan Petersen infiel a la historia, Ende echó pestes de una carísima superproducción que le sacó de sus casillas. La tildó de "gigantesco melodrama comercial, hecho de cursilería, peluche y plástico" y retiró su nombre de los títulos de crédito. Sería, con todo, un éxito de taquilla que George Miller explotaría aún en 1990 y 1994. Hubo además dos series, una de animación.

De rostro y maneras afables, con pinta de filósofo despistado, Michael Ende abandonó Alemania en la década de los sesenta para instalarse en Italia. 'Unicornio' era el nombre de su casa en Genzano, cerca de Roma, donde buscó refugio y evasión del estricto realismo alemán. Ansiaba una respiración fluida que se le hacía difícil en una Alemania "plagada de normas". Allí escribió su gran libro en una peripecia también inacabable, alentado por Mariko Sato, su segunda esposa, responsable de la versión japonesa de sus obras.

Nacido en el 12 de noviembre de 1929 en Garmisch-Partenkirchen, Michael Ende fue hijo de la fisioterapeuta Luise Bartholomä y del pintor surrealista Edgar Ende. Su padre, artista "degenerado" para el régimen nazi, le descubrió "el arte como una pintura fantástica del mundo". Desde crío se acostumbró a vivir en un mundo dual. El bohemio ambiente familiar no tenía relación alguna con el mundo exterior. Miembro de la agrupación antinazi Frente Libre Bávaro, el joven Ende tuvo que dejar los estudios para hacer la mili. Quería ser explorador y acabó como escenógrafo rendido al teatro de Bertold Bretch. "No encontré comedias que me inspiraran -explicaba-, de modo que comencé a escribirlas yo mismo".

Probaría suerte sin éxito como actor en Múnich. Escribió piezas decabaré político, hizo crítica de cine y trabajó para la radio durante varios años. Perdió el empleo y un amigo dibujante le solicitó un texto infantil. Tras ser rechazado por varios editores, sería el principio de una carrera jalonada de premios que arrancó con 'Jim Botón y Lucas el maquinista' (1960), traducida a 20 lenguas y premio Nacional de Literatura Alemana, y 'Jim Botón y los trece salvajes' (1962).

A DOS TINTAS

Su fascinación por los números y la tipografía le llevó a imponer estrictas condiciones para la edición de su 'Historia interminable'. Se imprimió a dos tintas y todos los capítulos comenzaban con las letras del alfabeto dibujadas. Los colores distinguían los dos planos en los que discurría la historia, mientras que las cabeceras de los 26 capítulos expresaban su fascinación porque la literatura universal se hubiera escrito con solo 26 letras.

Su otro gran éxito internacional fue 'Momo', aparecido en 1973. Es la historia de una niña que lucha contra los 'hombres grises' que roban el tiempo a las personas y que quiere devolvérselo a quienes carecen de él. "Ese es el auténtico robo del tiempo que realizan los hombres grises, y son de ese color, porque lo gris es la depreciación absoluta de la vida", diría de su alegoría contra el trabajo sistemático y desagradable.

Interesado por las filosofías orientales y los grandes místicos, creía que lo mágico no se opone a lo racional y que "la lógica de la realidad no es la única que existe". Admirador de Borges y deudor de 'El Aleph', reconocía en Novalis a otro de sus maestros. Heredero declarado deShakespeare, de Tolkien y sobre todo de Holderin y los románticos alemanes, creía que el hombre "está hecho de la materia de los sueños" y a ella se aferró reivindicando la imaginación como la salida más efectiva para los males de la humanidad.

Para Ende la fantasía era una verdadera salvaguarda en un tiempo marcado por el terror la guerra y la tragedia. "La fantasía es más necesaria que nunca en el siglo que vivimos", declaraba en una de sus últimas visitas a España en 1993. Sus inquietudes ecologistas le llevaron a escribir una ópera, 'La danza macabra de Hamelin', en la que, recreando la historia del flautista, planteaba una metáfora sobre los desastres naturales que a su juicio solo conducían a la muerte.

Su bibliografía se completa con 'El libro de los monicacos' (1970), 'Tragasueños' (1978), 'Jojo: Historia de un saltimbanqui' (pieza teatral de 1982), 'El Goggolori' (1984), 'El espejo en el espejo' (1986), 'El ponche de los deseos' (1989) y el heterogéneo 'Carpeta de apuntes' (1994), que alterna ensayos autobiográficos con relatos fantásticos y de aventura.


FUENTE: